Como conserjes, solemos trabajar solos por la tarde o tarde en la noche. Empezamos nuestro día de trabajo después de que el último trabajador haya apagado las luces y cerrado la puerta. Es un trabajo duro que hacemos por poco dinero en el anonimato de la noche, entre laberintos de cubículos vacíos y salas de conferencias. Algunos de nosotros no hablamos porque tememos ser deportados o despedidos.
«Violando en el turno de la noche» (Rape on the Night Shift), el documental de PBS Frontline, expuso el abuso sexual a mujeres inmigrantes que limpian los centros comerciales en donde nosotros compramos, los bancos en los que donde hacemos negocios y las oficinas en donde trabajamos. El documental encontró 42 demandas de las últimas dos décadas de una compañía en donde las conserjes habían sido acosadas sexualmente, agredidas o violadas en el trabajo.
Como conserjes, hermanas y sobrevivientes, nos hemos unido para defender nuestros derechos y hacer que la industria sea más segura para todos los trabajadores. Estamos orgullosos de que el Gobernador haya firmado la ley AB 1978 (González Fletcher), la cual exige que los empleadores de la industria de conserjería a que proporcionen capacitación sobre acoso sexual y prevención de la violencia a los empleados.
AB 1978 fue un primer paso para garantizar una total seguridad física, mental y financiera para nuestros compañeros de trabajo. Pero cuando se trata de incidentes de acoso o violencia sexual, a menudo nuestros supervisores no reciben la capacitación adecuada sobre cómo responder y, a veces, terminan sin hacer nada por eso. Trabajar en un lugar de trabajo aislado disminuye la probabilidad de que alguien intervenga o sirva como testigo.
Conocemos nuestra industria como trabajadores, sobrevivientes y expertos. Nos estamos empoderando a nosotros mismos y a nuestros compañeros de trabajo para educar a la fuerza laboral. Estamos aquí como expertos y sobrevivientes.
En conjunto con la asambleísta Lorena Gonzalez Fletcher, estamos patrocinando AB 2079, la cual requeriría que las consejeras pares, también conocidas como «promotoras», para que capaciten a otros trabajadores de conserjería sobre cómo prevenir el acoso y asalto sexual en el lugar de trabajo.
Muchas veces, nuestros compañeros de trabajo no saben reportar el acoso o la agresión sexual en el lugar de trabajo. Debido a la naturaleza única de nuestra fuerza laboral y nuestro lugar de trabajo, este problema requiere soluciones innovadoras. Los entrenamientos deben ser ofrecidos de manera que superen cualquier idioma o diferencias culturales. Para evitar abusos en el futuro, es vital que los conserjes comprendan la información y la capacitación provistas.
La consejería de igual a igual puede ser una herramienta de enseñanza eficaz, ya que el trabajador puede relacionarse más estrechamente con su compañero consejero que si la capacitación fuera impartida por una fuente o agencia externa.
Apoye AB 2079 la Ley de Empoderamiento del Conserje Sobreviviente. Terminemos con la violación en el turno de noche.