En 2017, los oficiales de seguridad miembros del sindicato SEIU-USWW de Los Ángeles y el Área de la Bahía, decidieron enfrentar la discriminación racial en el lugar de trabajo como parte de su campaña de contrato. Los miembros afroamericanos de la USWW estaban viendo que la discriminación laboral estaba destruyendo comunidades tradicionalmente negras en Los Ángeles y el Área de la Bahía, y querían hacer algo al respecto.
En Los Ángeles, el 17% de los trabajadores negros están desempleados, y en el Área de la Bahía, el 19% de los trabajadores negros están desempleados. En ambos casos, estos niveles representan el doble de los niveles de trabajadores blancos. Además, el ingreso familiar promedio para las familias negras en el condado de Los Ángeles es de ,000, mientras que para las familias blancas es de ,500. En San Francisco, las cifras son $ 104,000 para familias blancas y solo $ 29,000 para familias negras.
Aunque existen leyes para proteger a los trabajadores de la discriminación en el lugar de trabajo, éstas rara vez se hacen cumplir. Solo alrededor del 12% de las demandas interpuestas por discriminación en California son resueltas. Los oficiales de seguridad lucharon por el cambio y ganaron. Este año, el Gobernador Brown emitió una orden ejecutiva para que se establezca un comité para estudiar la aplicación local de demandas por discriminación. Esto conducirá a que se resuelvan más casos y a que la justicia se logre para más personas que han experimentado discriminación en el trabajo.